Llega al Teatro Maipo: “La Guerra de los Roses”, la comedia de Warren Adler interpretada por Adrián Suar y Carla Peterson; con dirección de Marcos Carnevale y producción de Adrián Suar y Lino Patalano.
Sin duda es un gran desafío llevar al teatro una película exitosa, todo está bastante bien resuelto, y para quienes vieron el film la expectativa se centra durante casi toda la obra en la gran Araña, (como lo fue en el Fantasma de la Opera).
Todo comienza con un fondo negro y una luz blanca para cada uno de los intérpretes, dialogando a un interlocutor (este no se ve), nos muestran como se conocieron en una subasta de arte, Oliver Rose (Adrián Suar) y Bárbara (Carla Peterson), allí se enamoran profundamente.Esto los lleva a casarse y con el tiempo llegan dos hijos, llevan dieciocho años de matrimonio, pero todo esto no dura como lo habían planeado, con el transcurso de los años se van conociendo profundamente y sacan a relucir todas sus miserias; la división de bienes siempre fue un problema, más cuando ambos quieren lo mismo, y aquí no son la excepción a la regla, ambos quieren quedarse con esa casa, esto se transforma en un botín de guerra, y para esto llegan a ser despiadados.
Fue una vivienda familiar, cada uno se atribuye que dio algo a la misma, viven llenos de comodidades, sauna, piscina, autos lujosos, y mascotas (ella una gata y él un perro; ni en esto se llevan bien).
Es una propuesta interesante que muestra algunos aspectos de la vida conyugal, comunes a casi todas las parejas, con una buena dosis de acidez, humor y por momentos la crudeza de la realidad.
Los sueños a veces no se hacen realidad, de diferentes formas pueden llegar las frustraciones, como dice el dicho “todo lo que brilla no es oro”, estuvieron las desatenciones, los engaños, el egoísmo, las apariencias y los sueños se perdieron.
Todo esto envuelto con una buena resolución escenográfica, para ir marcando los diferentes conflictos; se recrea el sauna, los estudios jurídicos (Alejandro Paker y Fabián Arenillas), lugares de audiencia, entre otros; todo bien iluminado, pero el más importante es el hall de la casa, con una importante escalera, y la reina del escenario la gran araña colgante, en esos lugares se van desplegando todos diálogos entre los protagonistas; la dirección de Carnevale es algo lineal, lo inclina más a la comedia, a mi parecer hay un poco de abuso de la malas palabras para causar un mayor impacto de humor, algunas situaciones divertidas que hacen reír bastante a la platea, Carla Peterson luce un buen vestuario, tiene un gran manejo del escenario, arma buenos climas, una buena expresión corporal y Suar acompaña bien, dentro de sus conocimientos actorales y por el carisma de ambos, sin ninguna duda obtendrán una buena recaudación.
Teatro Maipo: Esmeralda 443.
Funciones: Jueves y viernes 20.30 hs.
Sábados -dos funciones- 20.30 y 23hs. Domingos 20 hs.
Localidades: desde $100.
Mi Opinión: Buena
Por: Susana Salerno
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en esta página.