Dirección y Guión: Roberto Andó
Actores: Toni Servillo, Valerio Mastandrea, entre otros
Género: Comedia Dramática
Origen: Italia/Francia/Alemania, 2013
Duración: 94 minutos
Apta para mayores de 13 años
Estreno en Argentina: 28.08.14
Las dos caras de la política.
Es una gran noticia, y muy buena por cierto, que llegue a
la cartelera una comedia italiana. Nos muestra a un candidato del principal
partido de la oposición, Enrico Oliveri (Toni Servillo, “La gran belleza”) a
quien las encuestas le están dando resultados desfavorables, los sondeos sobre
las inminentes elecciones lo dan como perdedor, él comienza a sentirse molesto
con toda esta situación y una noche
decide irse y desaparecer. Ante tal momento su ayudante Andrea Bottini (Valerio
Mastandrea, un personaje clave lo hace rendir) y su mujer, Anna (Michela
Cescon), continúan dándole vueltas al por qué de la fuga. Su secretario ante
este hecho se desespera y elabora un plan: solo unos pocos sabrán la verdad y deciden
reemplazarlo por el hermano gemelo del político Giovanni Ernani, un filósofo
recién salido del manicomio.
De esta forma reaparece en la escena este político, pero
el verdadero se encuentra escondido en París, en casa de una ex novia de nombre Danielle (Valeria Bruni Tedeschi en
una buena interpretación. Trabajo en
“Munich” para más datos) casada con un notable realizador cinematográfico. A lo
largo de la historia nos encontramos con enredos, toques de sátira y cinismo
político, una burla inteligente a ciertos momentos de la política, los diálogos no son ajenos a lo que puede
pasar en cualquier país, con elocuencias fluidas, reflejando una fuerte crítica
social y política, todo con mucho humor y que muestra como este loco lindo
estimula a todos y tiene un gran carisma.
La interpretación de Toni Servillo, en un doble papel,
resulta brillante, deslumbrante y una clase de actuación, sabe aprovechar cada
plano y la cámara, con sus distintos gestos, caras, posturas, hace dos
personajes y los resalta en los
distintos momentos, tiene varios momentos divertidos nos solo por lo que se
dice sino también en algunas escenas como cuando baila con la canciller alemana,
entre otras. Resulta amena, inteligente, deliciosa, perspicaz, para deliberar y
a aquellos memoriosos en varios pasajes les va a traer recuerdos de aquellas
comedias italianas clásicas.
Mi Opinión: Muy Buena
Por: Susana Salerno
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en esta página.