Foto Por Susana Salerno. |
Una historia llena de amor, emoción, magia y
que contiene un claro mensaje.
Ahora Pepe Cibrián escribe un texto y lo adapta para el
escenario de nuestro país, incorporando situaciones con una impronta muy
nuestra, le va agregando poesía, amor y humor. Otorga los tiempos para el
lucimiento de todo el elenco. Es un clásico en Cibrian porque nuevamente
tenemos música en vivo, esta vez, a través de Santiago Rosso como compositor de
esta su primera obra, (Rosso fue pianista en la orquesta de Drácula y Pepe
Cibrián lo convocó para este musical).
Narra la vida de un hombre llamado Lord (Pepe Cibrian), en un accidente
fallecieron su esposa e hija y se transformó en un ser avaro, cruel, ermitaño y desconsiderado, no
quiere relacionarse con el resto de las personas prefiere vivir solo, sumergido
en sus miserias y pensando únicamente en su fortuna. Se niega a pasar la
navidad junto a su yerno Martin (Damián Iglesias, “Drácula, el musical”) y su nieta
a la que no quiere conocer.
Lord, en su gran mansión y aislado de todos, comienza a
ser asolado por los recuerdos y las culpas. Se presentan figuras del pasado, con
los que va teniendo diálogos muy ricos. Es el turno de un amigo Patrick
(Ignacio Monná, “Todas las canciones de amor”) que acaba de perder.
Llega Lady Parca (Georgina Barbarossa) quien entrega una
chispa muy especial, delirante, y con intervenciones que le dan agudeza, humor y
momentos para la reflexión. Una mención aparte para cuando celebran el
“Día de los muertos” baile, carcajadas y un instante para la meditación. Otorga un toque especial cuando en la obra ingresa
Matilde, la esposa de Lord (Georgina
Barbarossa, tiene un estilo similar a Ana María Campoy), ambos tienen mucha
química y muestran todos sus dotes actorales haciendo vibrar a la platea. Ella,
interpreta dos personajes, esta excelente, visualmente dotada de mucho talento
y profesionalismo.
Además se presentan su otro yo, pero más joven que Lord
(Emiliano Oberndorfer, “Cenicienta, un cuento musical”) que le mostrará lo que
desaprovechó y como perdió la inocencia de la infancia. Del mismo modo se presentan Adela, la hija
muerta (Belén Paqualini) y Jonás (Gustavo Monje) un personaje dentro de los
vivos, entre otros.
Cada situación se encuentra muy bien musicalizada, esto
le da todos los toques que requieren su texto e intérpretes al igual que su
iluminación, escenografía y vestuario. Se nota el toque que le da la directora
Valeria Ambrosio (“Rent”, “Priscilla, la reina del desierto”).
Es un placer ver en escena juntos a Georgina Barbarossa y
Pepe Cibrián para disfrutarlos, se nota
que se conocen mucho y le otorgan a la puesta todo lo que misma requiere. Nos
dejan varios mensajes y reflexiones.
Elenco: Pepe Cibrian Campoy, Georgina Barbarossa, Gustavo Monje, Damian Iglesias, Belen
Pasqualini – Ignacio Monna, Alejandro Gallo Gosende, Rossana Laudani, Diego
Bros, Emiliano Oberndorfer, Jimena Gonzalez,..
Duración: 1 hora 45 minutos.
Funciones: Jueves y Viernes 21 hs – Sábados 20 y 22.30 hs
y Domingos 20 hs.
Valor: desde $350 a $700.
Teatro Astral: Av. Corrientes 1643 – CABA
Mi Opinión: Muy Buena.
Por: Susana Salerno
@susanasalerno1
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