Se reestrena “Así es
la vida”. El éxito teatral del 2014 vuelve al escenario del Teatro Nacional
Cervantes.
Ernesto (Roberto Carnaghi) y Eloísa (Rita Terranova) son un
matrimonio sólidamente constituido según los mandatos de fines del siglo XIX y
principios del XX. Tienen tres hijas: Felicia (Malena Solda), Adela (Paloma
Contreras), y Margarita (Celeste García Satur) y un hijo, Eduardo (Felipe
Colombo). En esta casa de un barrio porteño de principios del siglo XX (1905)
convive este matrimonio con sus hijas y además el hermano de Eloísa, Alberto
(Mario Alarcón). La historia de estos personajes es la típica de una familia
burguesa: Un padre comerciante en ascenso una madre devota de su hogar, su
marido y sus hijos y un tío que actúa en política y pertenece al roquismo y
forma parte de ese “Orden conservador” que gobernaba la Argentina mediante
un aparato partidario cuyo elemento
distintivo lo constituía el “Fraude electoral” citado por los autores en un
pasaje de la obra.
Ernesto y Eloisa aspiran que sus hijos triunfen en la vida,
los ven hacerse grandes, casarse, formar sus propias familias, forjar sus
destinos y por supuesto irse, dejándoles esa sensación tan particular del nido
vacío. En el medio de este devenir de la vida misma los autores nos muestran un
universo que incluyen: la inmigración, encarnada por los personajes de Liberti
(Salo Pasik), un inmigrante italiano y colaborador de Ernesto, además de amigo
de la familia y Barreiro (Néstor Sánchez) un inmigrante español y soltero por
elección y la situación política de principios del siglo XX marcada por el
fraude electoral y por los albores del socialismo, en este caso representado
por el personaje de Carlos (Mariano Mazzei) un socialista e idealista que pretende
casarse con Felicia.
A lo largo de la obra se pueden observar los cambios que se
van produciendo en esta familia, rupturas y continuidades a lo largo de
veintiocho años. Para marcar esto, Doria comienza situando la acción en 1905,
para luego saltar a 1916 en el segundo acto y finalmente terminar en 1934 con
un tercer acto final. Lo que deja claro el director mediante esta línea
temporal a lo largo de la cual se va desarrollando el sentido del texto es que
los cambios que se producen en la forma de vivir y los efectos que el progreso
tiene sobre la cotidianeidad, incluyendo un periodo marcado por la “Gran
guerra”, van a impactar en la conformación de esta familia, que como muchas van
a ver como los hijos se van, como los mismos triunfan y fracasan , como en
definitiva y como se señala en varios tramos
de la obra “Así es la vida”.
En cuanto a las actuaciones, demás está decir que los
papeles principales, y como señalábamos anteriormente, se encuentran
interpretados con solvencia por: Carnaghi, Terranova y Alarcón. Son correctos
los desempeños de Malena Solda y Salo Pasik (en el papel de Liberti; un
inmigrante italiano y amigo de la familia), el resto del elenco acompaña con
corrección.
“Así es la vida” es uno de los clásicos que entre otras
cosas fue llevado al cine como mucho éxito en 1939 y 1977, constituyéndose en
una obra que se instaló en el imaginario
nacional. Es una obra que al igual que muchas otras escritas en esa época
retrata una sociedad que vive los cambios de un siglo que comienza siendo y
citando a Enrique Santos Discépolo “problemático y febril”. ”Así es la vida” es
uno de esos textos que por clásico va a trascender a las épocas que le toque
transitar, porque su espíritu más allá de lo local es universal, porque en
definitiva el hombre no nació para vivir solo y necesita, ahora con una mirada
más actual, encontrar en esos valores que fueron un mandato a principios del
XX, una actualización de lo más positivo de los mismos y poder traspolarlos al
siglo XXI en pos de conformar una sociedad donde la tolerancia y el respeto por
el otro no se constituyan en la excepción sino en la regla.
Mi Opinión: Muy Buena
Por: Hernán Jager
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