La obra se desarrolla durante dos horas sin escenografía y prácticamente sin utilería, con muy buenas interpretaciones y un vestuario impecable (está mezclado también con lo actual, algo diferente), la puesta en escena es dinámica y divertida en todo momento, es que detrás de esta puesta esta la mano del director Rubén Szuchmacher (61). Nos introduce en un drama histórico escrito por Shakespeare en 1597 en torno al soberano de la casa de Lancaster, precedido por Ricardo II y sucedido por Enrique V.
Nos muestra al Príncipe Hal y a su padre preparándose para la batalla contra los rebeldes de Gales, quienes representan una amenaza para la Corona Inglesa. El príncipe Hal, a medida que se va involucrando en la problemática que representa la batalla para defender la corona y al tiempo que se transforma en un soldado más profesional se va alejando de sus amigos de andanzas y de taberna, entre ellos John Falstaff.
Sir John Falstaff (encarnado por Horacio Peña) es poderoso, irónico, tramposo y manipulador. Demuestra su soberbia y se siente seguro de sí, ya que cuenta con la amistad del príncipe. Esto va a tomar un cariz inesperado cuando el Príncipe Hal suceda a su padre luego de la muerte de este.
Lautaro Vilo en la piel del Príncipe Enrique logra capturar la difícil transición de un príncipe de vida licenciosa a un maduro monarca luego de la muerte de su padre. Su fuerte presencia en el escenario hace convencer a la audiencia de sus intenciones, si no a sus hermanos que se mantienen con la duda hasta el último momento. El rey es representado por Horacio Acosta, quien nos conduce por la última etapa de la vida de Enrique IV mostrando nuevamente un gran oficio, tanto cuando trata de combatir la rebelión de los galeses como cuando es sofocado por una enfermedad que lo consume lentamente. Graciela Martinelli personifica a una prostituta entrada en años y envuelta en todo tipo de actos corruptos. Años atrás fue la preferida de Sir John Falstaff, pero ahora sus preferencias están puestas en el personaje de Irina Alonso (La prostituta joven), quien compone un personaje entre contenedora y cruel que aprovecha toda oportunidad a su alcance para jugar con los sentimientos de Falstaff.
La puesta en escena de Rubén Szuchmacher es interesante por muchos aspectos, pero quizás el merito fundamental de esta adaptación tiene que ver con la traducción que realizó Lautaro Vilo, y que logra poner al alcance de todo el público (sin necesidad de ser especialista en el teatro de Shakespeare) esta obra del dramaturgo inglés, quizás una de las más complejas, con un lenguaje claro y fácilmente comprensible, sin perder en ningún momento el espíritu crítico y humorístico a la vez que posee el libro.
Las actuaciones, como destacamos anteriormente, son buenas en líneas generales pero hay que destacar el trabajo de Horacio Peña, que compone un Falstaff que seguramente será recordado por muchos años no solo por la entrega física sino por lo que emocionalmente deja sobre el escenario, indudablemente ayudado por la excelente caracterización que logra.
Un obra de visión imprescindible para todos los que aman el Teatro de Shakespeare, y muy recomendable para aquellos que quieran acercarse por primera vez a los textos de este gran dramaturgo e icono de la Literatura Universal. Recordemos que esta obra se presentó en el ciclo Globe to Globe, Cultural Olympiad 2012, evento de nivel mundial y muy prestigioso donde se representan todas las obras de William Shakespeare contando con la presencia de elencos de diversos países.
Actúan: Horacio Acosta (Rey Enrique IV / Diente), Irina Alonso (Lady Percy / Doll Tearsheet), Francisco Civit (Lord Bardolph / Poins / Conde De Westmoreland / Silence), Graciela Martinelli (Mrs Quickly / Lady Northumberland), Horacio Peña (Sir John Falstaff), entre otros.
Dirección: Rubén Szuchmacher
Funciones: Jueves a Sábado 20:30 hs /Domingo 19:30 hs
Localidades desde $35.
Teatro Regio: Avda. Córdoba 6056 Capital Federal.
Mi Opinión: Muy Buena
Por: Susana Salerno
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en esta página.