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jueves, 11 de marzo de 2010

Película: Mongol

Dirección: Sergei Bodrov
Actores: Tadanobu Asano, Honglei Sun, entre otros
Género: Drama/Bélica
Origen: Kazajstán/Rusia/Mongolia/Alemania, 2007
Duración: 126 minutos
Calificación: Apta para mayores de 13 años
http://www.mongolmovie.com/

El director Sergei Bodrov, esta película que fue nominada al Oscar en 2008 como Mejor Película Extranjera, (la que resulto ganadora ese año fue “los falsificadores”), se desarrolla esta historia en la estepa y en las montañas de Kazajistán y en China; a través de sus buenos planos se destaca una maravillosa fotografía, sus rostros, mucha acción y las diferentes situaciones que hace a la historia.
Cuenta la vida de Genghis Khan desde 1186 su esclavitud hasta que conquistó la mitad del mundo incluyendo Rusia en 1206.
Narra la vida de un joven Genghis Khan, y cómo este desde sus primeros años de vida lo llevó a convertirse en un conquistador legendario; cuando tenía 9 años de edad Temujin (que significa el mejor acero-el hombre supremo de la tierra), interpretado por Tadanobu Asano, sale de viaje con su padre para elegir a una niña que luego será su futura esposa.
En esa aldea conoce a Börte (Khulan Chuluun), pero en realidad él es el elegido, este promete regresar después de cinco años para casarse con ella; cuando emprenden el retorno a su hogar el padre de Temujin es envenenado por los tártaros en el viaje y muere.
A raíz de esto por ser tan joven quien tomo el poder es Yesugei, él su madre y sus seis hermanos se vieron obligados a vivir en la indigencia, alimentándose de la recolección agrícola y de la pesca, pasaron hambre, humillaciones e incluso la esclavitud, pero más tarde con la ayuda de Börte que supera todas las miserias de su infancia para convertirse en uno de los grandes conquistadores del mundo y muy conocido.
Además desde niño estuvo protegido por su dios el todo poderoso “tengri” dándole toda la fuerza para poder vencer los obstáculos de sus adversarios, como si todo estuviese marcado por el oráculo (como los griegos).
Contiene una gran estética tanto en las guerras, con en el amor, conocemos sus costumbres, sus ritos, su cultura por eso nos enseñan que “los mongoles no matan niños” o “los mongoles no van a la guerra por amor a una mujer”, (esto no es cierto) y “todos algún día va a entender mongol”.
Es convincente la sangre que salta sin exagerar en cada batalla, su narración es épica pero también se mezcla con el amor, el mismo que lo lleva a la lucha para salvarlo, con escasos diálogos solo con las miradas y acciones bastan para expresar todo; pero le falta encanto queda a mitad de camino.

Calificación: Buena

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